¿Cuántas veces hemos oído que las “agujetas” eran causadas por la acumulación del ácido láctico en nuestros músculos cuando cristalizaba?

Pues bueno, vamos a aclarar que el ácido láctico es el responsables del cansancio muscular, pero hemos de decir que con la temperatura corporal no cristaliza. El ácido láctico puede ser el responsable de una sensación de ardor durante la actividad deportiva, pero no de la sensación de dolor posterior que conocemos como agujetas. Lo que sí podemos afirmar, es que es un elemento limitador del rendimiento de un deportista y por lo tanto, de un corredor.

Pero nos preguntaremos qué es el ácido láctico, porqué se produce o cómo se elimina, especialmente si no somos expertos en medicina deportiva como es de esperar.

El ácido láctico es un compuesto orgánico producido por nuestro organismo cuando realizamos una actividad física y que históricamente se ha asociado solamente con efectos negativos. Sin embargo, estudios recientes evidencian que el ácido láctico tiene un efecto positivo en deportistas en general y en los runners en particular, optimizando nuestro rendimiento y limitando la capacidad física del atleta dentro de niveles adecuados para evitar consecuencias negativas.

Pero veamos de una forma sencilla como se produce este proceso.

A los músculos, el combustible que más les gusta es el oxígeno. Pero cuando el aporte de oxígeno se ve superado por una demanda excesiva, el combustible alternativo que utilizan los músculos para efectuar sus contracciones en un medio anaeróbico (sin la presencia de oxígeno) durante la práctica deportiva, es la glucosa.  La glucosa, por un proceso llamado glucólisis se transforma en piruvato. Cuando el organismo cuenta con mucho oxígeno, el piruvato se dirige hacia una vía aeróbica para ser metabolizado obteniendo más energía. Pero si la disponibilidad de oxígeno se reduce, el piruvato se metaboliza de otra forma, a través de la cual se forma el ácido láctico, continuando la producción de energía. Según aumentan las pulsaciones al incrementar la intensidad de ejercicio físico, menos oxígeno llega a nuestros músculos y más ácido láctico se produce, actuando como carburante para continuar la actividad. Si se demanda más energía y el oxígeno en sangre no es suficiente, aumenta la concentración del ácido láctico que produce una acidificación de la masa muscular próxima y la inhibición de enzimas metabólicas musculares. Aparece el cansancio y la falta de control muscular al fallar el sistema de contracción. La fatiga muscular que aparece, es el resultado de un fallo del sistema de eliminación del ácido láctico que en circunstancias normales es reutilizado y eliminado.

Con todo esto que suena a efecto negativo, nos podemos preguntar entonces, cuáles son los efectos positivos del ácido láctico para los corredores. Pues bien, el ajuste de la intensidad de los entrenamientos va a estar condicionado por los síntomas de cansancio ligados a la metabolización que produce el ácido láctico, mejorando su eficiencia y tolerancia en el músculo. Este parámetro conocido como “umbral del lactato” relacionado con la frecuencia cardiaca, se puede obtener por medio de una analítica de sangre y medir la evolución según la respuesta fisiológica de cada corredor.

Categorías: Runners

0 comentarios

Deja una respuesta

Marcador de posición del avatar

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *